ALL CHEERLEADERS DIE (2013)

Estados Unidos. Dirección: Lucky McKee, Chris Sivertson. Producción: Andrew van den Houten, Robert Tonino / Modernciné. Guión: Lucky McKee, Chris Sivertson. Fotografía: Greg Ephraim. Música: Mads Heldtberg. Montaje: Ben La Marca, Zach Passero. Intérpretes: Caitlin Stasey, Sianoa Smit-McPhee, Brooke Butler, Tom Williamson, Reanin Johannink, Amanda Grace Cooper. Duración: 90 min

IDIOMA: inglés / SUBTÍTULOS: español

Increíble pero cierto, esta película que noqueó a los valientes asistentes a la sección Midnight Madness de Toronto se rodó en un instituto de Los Ángeles llamado Cathedral, situado muy cerca de Chinatown y construido en 1925 sobre un terreno que hasta 1900 había sido ¡un cementerio! Declarado Monumento Cultural en 1984 por el ayuntamiento angelino, sus equipos de fútbol americano y béisbol reciben el sobrenombre de Phantoms, vosotros os imagináis cristalinamente por qué. El film, historia de una venganza que empieza a salir torcida cuando poderes sobrenaturales entran en juego, es posible y probablemente la comedia más cabrona y divertida de la cosecha de este año 2013. Entre otras cosas porque la dirigen dos pájaros de cuidado, Lucky McKee –autor de May (2002)– y Chris Sivertson –Sé quién me mató (2007)–.